Ocho de cada diez reportaron: temor o preocupación por su salud o la de sus seres queridos; cambios en sus hábitos de sueño, angustia, ansiedad…
De acuerdo con una encuesta realizada por la Consultora Julio Aurelio-ARESCO, a pedido del Centro de Investigaciones de Enfermedades No Transmisibles (CIENTA) en Argentina, 4 de cada 10 fumadores reconocieron fumar más durante la cuarentena.
El trabajo se llama “Estudio de Opinión sobre hábitos y tabaquismo en tiempos de cuarentena”, se realizó de manera remota, con la participación telefónica de 3.418 individuos mayores de 16 años de todo el país durante el mes de junio. Según los resultados, 20,8% fumaba, 16,1% eran fumadores habituales y el 4,7% lo hacía “ocasionalmente”.
Entre los fumadores, un 30% intentó dejar de hacerlo, pero sin éxito; 48.1% lo pensó, pero no lo intentó y un 14.5% ni siquiera lo intentó. En general, el status de “fumador” fue más elevado en el sexo femenino, en los niveles socioeconómicos bajo y medio-bajo y entre los más jóvenes.
Cabe destacar que ocho de cada diez encuestados reportaron alguna de estas afecciones: temor o preocupación por su salud o la de sus seres queridos; cambios en sus hábitos de sueño, angustia, ansiedad; además, estrés por encima de lo habitual, irritabilidad, dificultades para concentrarse e incluso agravamiento de problemas de salud preexistentes También más de 3 de cada 10 (36,4%) manifestaron cambios en su alimentación desde el comienzo de la cuarentena y el 35,6% informó que comió más que antes.
Con respecto a la actividad física, el 41,5% aseguró que hace menos que antes, y el 21,1%, que no hace ejercicio ninguno. Las razones de algunos fueron la imposibilidad debido al encierro (49,1%) o la falta de ganas (34,5%).
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CAB
