Salir del clóset es una decisión personal y voluntaria, y esta debe hacerse tomando en consideración el ambiente en el que se hará
El 11 de octubre se celebra el Día Internacional para salir del Clóset. Es, como su nombre lo indica, una fecha que busca concienciar sobre la importancia de salir del armario o salir del closet.
La invitación se extiende a las personas lesbianas, gays y bisexuales para que, entre otras acciones, utilicen alguna prenda relacionada con el orgullo, como un triangulo o los colores del arcoíris.
La fecha fue implementada por el Dr. Robert Eichberg y Jean O’Leary en 1988, en conjunto con la celebración de la Segunda Marcha por los Derechos de Gays y Lesbianas, que tuvo lugar en Washington DC, Estados Unidos, para pedir la igualdad de derechos para todas las personas sin discriminación.
Los eventos del “National Coming Out Day” o Día para salir del Closet, son usados para sensibilizar a la población general sobre los movimientos LGBTI en un esfuerzo de brindarles una cara más familiar. [1]
“Salir del closet” es una expresión lingüística que se ha utilizado para referirse a la acción voluntaria y pública de una persona de expresar su orientación sexual no heterosexual. De tal manera que funciona como una analogía que ilustra la idea de mantener un aspecto de la vida encerrado, guardado u oculto, principalmente por temor a ser discriminado o estigmatizado por ser homosexual o bisexual; o dicho de otra manera, por no ser heterosexual.
A lo largo de los años han sido muchas las personas famosas que han expresado públicamente su homosexualidad o bisexualidad. Solo para mencionar algunos los cantantes David Bowie, Freddy Mercury y Elton John lo hicieron en la década de los 70.
En los años 90 fueron la actriz Jane Marie Lynch, la cantante Melissa Etheridge y la que es considerada la salida del closet más famosa, la de la comediante norteamericana Ellen DeGeneres. Posteriormente, son muchos los personajes de la farándula y también del ámbito deportivo quienes han estado optando por salir del closet.
En el caso de Ellen DeGeneres, luego de salir del closet ella expresó que había decidido hacerlo porque sentía que era lo correcto pues ser gay está bien; además expresó que tenía miedo porque pensaba que las personas la rechazarían.
Posteriormente su programa de televisión fue cancelado y le tomó tres años aproximadamente poder regresar a la televisión con un nuevo programa. Más recientemente relató los diferentes tratos de discriminación que recibió de sus compañeros de trabajo y antiguos amigos.
Salir del clóset es una decisión personal y voluntaria. Esta debe hacerse tomando en consideración el ambiente en el que se hará. Por ejemplo, en países donde la homosexualidad es aún considerada un delito debe analizarse los riegos y las consecuencias de esta decisión.
Los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI) continúan a las sombras de la discriminación generalizada. Ataques contra estas personas, desigualdad en el disfrute de sus derechos, centenares de crímenes de odio y la indiferencia de las autoridades a la hora de castigar a los responsables es lo que destaca en los informes de Amnistía Internacional sobre la situación de los derechos humanos en el mundo cuando se habla de esto.
A pesar de los múltiples beneficios que trae consigo salir del closet, hay que ser valiente para emprender esta acción tomando en cuenta que aún cuando no haya situación de riesgo de muerte o castigo, existe la posibilidad de seguir siendo objeto de tratos crueles y degradantes.
Otros actos de discriminación como tratamiento desigual en el lugar de trabajo, la no asignación de labores acorde a los conocimientos, limitaciones en ascensos e inclusive el despido podrían ocurrir.
En el hogar, siempre existe la posibilidad de no contar con la comprensión y el apoyo de los padres, hermanos y allegados. Amigos de la infancia o de la universidad podrían decidir alejarse y romper una relación, que quizás no era una verdadera amistad.
La invitación es a ser visibles y salir del closet, vivir una vida en total libertad de presiones sociales, mentiras y engaños que pueden causar un gran dolor a todos los involucrados tomando en consideración todos los aspectos antes mencionados. A quienes son cercanos a una persona homosexual o a una mujer homosexual, el llamado es al respeto y la tolerancia.
A entender que salir del closet requiere de gran valor. Quienes deciden salir del closet temen por su vida, temen al rechazo de sus seres queridos, temen perder su empleo, temen ser víctimas de crímenes de odio, en esencia, temen ser asesinados por la ignorancia y la intolerancia de la sociedad.
Con información de Amnistía Internacional