Los prematuros pueden desarrollar retinopatía del prematuro, enfermedad que causa ceguera en las primeras semanas de vida, por lo que se aconsejan a los padres solicitar una valoración entre la semana 6 y 8, tras el alumbramiento
Los bebés que nacen antes de tiempo pueden desarrollar retinopatía del prematuro, una enfermedad que causa ceguera en las primeras semanas de vida, por lo que es necesario, que mamá o papá soliciten una valoración oftalmológica con un especialista para buscar alteraciones visuales.
Esta enfermedad no se presenta en la mayoría de los infantes prematuros, sin embargo, algunos bebés pueden presentar desprendimiento de la retina antes de los tres meses de edad.
Es necesario realizar la evaluación médica entre la cuarta y la sexta semana de nacimiento, pues antes no se presentan manifestaciones de alguna afectación visual ni molestias.
En esta prueba, el oftalmólogo dilata la pupila para revisar el fondo del ojo. Si el niño manifiesta alguna alteración que amenace su visión, se interviene de inmediato.
Con la detección oportuna y la aplicación de tratamientos especiales como el rayo láser en los primeros meses de vida, se detiene la enfermedad y se conserva la visión. Con este método se limita la falta de oxígeno en el ojo y permite su desarrollo de manera casi normal.
En una sola sesión de rayo láser se puede detener la enfermedad. Aunque en algunos casos se requerirá de una sesión adicional. Finalmente, un especialista en oftalmología pediátrica brindará a tu bebé la rehabilitación adecuada.
Gracias a los avances médicos ha aumentado la supervivencia de bebés prematuros y se detectan más casos de retinopatía en este grupo de la población.
