Cada año se selecciona un tema específico para destacar la importancia de algún punto especial para el control del tabaco, este 2020 fue “Proteger a los jóvenes de la manipulación de la industria y evitar que usen tabaco y nicotina”
En el marco del Día Internacional Sin Fumar, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció a México por sus avances en el control del tabaco siguiendo un enfoque multisectorial.
Se trata de un premio compartido entre tres instituciones que fue entregado por Cristian Morales, Representante de la OPS/OMS en México a la Secretaría de Salud, a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y a la Secretaría de Economía durante el desarrollo de la conferencia vespertina.
México logró recientemente dos hitos en el control del tabaco siguiendo un enfoque multisectorial para abordar la epidemia del tabaco:
- Después de 8 años sin un aumento de impuestos sobre los cigarrillos, a finales de 2019 el Congreso de la Unión aprobó una actualización del importe fijo del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) sobre los cigarrillos dentro del Paquete Económico de 2020. Esta actualización es un ajuste de la inflación desde 2011, la fecha del último aumento.
Este ajuste de los impuestos sobre el tabaco fue posible gracias al liderazgo del Secretario de Salud y el Secretario de Hacienda y Crédito Público y busca que los ajustes de precios se mantengan al día con la inflación, lo que garantiza que la asequibilidad de los cigarrillos disminuya a medida que aumentan los precios.
Esta medida ha demostrado su impacto benéfico en la salud y está en sintonía con el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco.
- El segundo logro también es producto de una articulación intersectorial, estrategia fundamental para el éxito de las políticas de control del tabaco: como resultado de una destacada colaboración entre funcionarios de las Secretarías de Salud y Economía y Finanzas, México prohibió a principios de 2020, la importación de sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN), sistemas similares sin nicotina (SSSN) y productos de tabaco calentado (PTC), implementando una política destinada a prevenir el uso de estos productos en la población, particularmente por parte de los jóvenes.
Al comienzo, estos dispositivos parecieron surgir como competencia al tabaco, pero no fue así; millones de consumidores se han vuelto adictos a la nicotina usando estos productos. Las grandes empresas tabacaleras han comprado o invertido en las firmas líderes de cigarrillos electrónicos.
Estas empresas han usado tácticas similares a las de la industria tabacalera para atraer a consumidores jóvenes. Por ejemplo, antes de que algunos países los prohibieran, llegaron a ofrecer más de 15,000 sabores de cigarrillos electrónicos, varios dirigidos a niños y adolescentes.
Muchas investigaciones muestran que los cigarrillos electrónicos, al igual que los productos de tabaco, son muy adictivos y aumentan el riesgo de tener cardiopatías y trastornos pulmonares, e indican que los niños y adolescentes que consumen cigarrillos electrónicos tienen el doble de probabilidad de convertirse en fumadores más adelante.