Tampoco se les debe acostar boca abajo porque desde el punto de vista ortopédico, esta posición altera el correcto desarrollo de las extremidades inferiores
Envolver a un bebé como un “taquito”, sentarlo hincado o colocarle zapatos duros antes de que camine es más peligroso de lo que siempre hemos pensado, provoca diferentes tipo de lesiones que, de no corregirse, pueden terminar en una operación de cadera o rodillas en la vida adulta.
Especialistas de Ortopedia en el Instituto Nacional de Pediatría (INP) advierten que la práctica de formas tradicionales para arropar a los bebés, como cobijarlo en forma de “taquito” puede ser perjudicial, y en caso de existir alguna anomalía en la cadera, esto complica el problema.
Por lo que, lo correcto es que duerman de tal forma que puedan mover libremente sus extremidades, y en caso de que haga frío, habrá que ponerles un mameluco que los proteja.
Igualmente, se recomienda el uso de zapatos suaves para evitar en el futuro problemas de pie plano severo, por lo que a los menores de dos años y medios no hay que ponerles zapato duro o de media botita. El pie debe estar libre para que se fortalezcan sus músculos y tengan apoyo para caminar.
Por otro lado, tampoco se les debe acostar boca abajo porque desde el punto de vista ortopédico, esta posición altera el correcto desarrollo de las extremidades inferiores y podríamos causarles lo que comúnmente se conoce como “piernas charras”. La mejor postura, es que duerman de lado en posición fetal.
De esta forma, dicha anomalía de postura, así como las caídas frecuentes por la posición de las piernas y el dolor en extremidades inferiores, son las principales causas de consulta en ortopedia pediátrica.
En este sentido, es importante saber que antes de los 10 años de edad se puede corregir la mala postura de los menores, ya sea con plantillas o con zapatos especiales. Y en caso de no atender ese problema, en la vida adulta la persona caminará ya sea con los pies hacia adentro o roza punta con punta, lo cual altera la posición en la cadera y provoca dolor en esa zona del cuerpo o en las rodillas.
Además, una inadecuada posición de las rodillas desgasta los huesos y si además la persona tiene sobrepeso, el problema se complica y requerirá una prótesis de rodilla para poder desplazarse. En cambio, si es persona delgada, obviamente el daño es menor.
