El cáncer de próstata es un tumor maligno en la glándula prostática que en sus etapas iniciales no presenta síntomas específicos, por eso los hombres mayores de 40 años deben realizarse la prueba del antígeno prostático
La falta de una cultura de la prevención entre los varones mexicanos mantiene una alta tasa de casos de cáncer de próstata que son detectados enetapas ya muy avanzadas, afirmó el especialista Christian Isaac Villeda Sandoval.
El también vicepresidente de la Asociación Mexicana de Cirugía Robótica explicó, en entrevista con Notimex, que ese tipo de cáncer se mantiene como una de las principales causas de muerte entre la población varonil mexicana y la principal entre hombres en edad avanzada.
El cáncer de próstata es un tumor maligno en la glándula prostática que en sus etapas iniciales no presenta síntomas específicos.
Por ello es fundamental que los hombres después de los 40 años se realicen la prueba del antígeno prostático a través de una muestra de sangre.
Sin embargo, según cifras de la Secretaría de Salud del Gobierno de México, más del 70 por ciento de los casos que se detectan al año se tratan de un cáncer en etapa avanzada y por ello la alta incidencia de mortalidad.
“El acceso e interés por los programas de prevención aún es bajo, y los hombres no tienen aún la cultura, como si ya la tienen muchas mujeres que cada año se hacen una mastografía o el Papanicolau”, señaló.
Muchos hombres, dijo, creen que con hacerse el examen una vez es suficiente y nunca más se vuelven a checar la próstata, a menos de que sientan molestias, por ello la gran mayoría de los casos se detectan ya con mucho avance.
En cuanto al tema de la cirugía robótica, expuso que México ya ha logrado ampliar su oferta de servicios los últimos años.
Se trata de una técnica avanzada de intervención quirúrgica que surgió de la mano con el desarrollo de la urología a nivel internacional en los últimos años, pues su mayor uso es para la extirpación de tumores en la próstata, comentó.
En países desarrollados ya es la elección más común para el tratamiento quirúrgico de muchos tipos de cáncer, además de el de próstata, riñón y vejiga, entre otros.
“En México por la cuestión económica no ha podido entrar tan rápidamente como en esos países. Pero en los últimos años, ha habido un crecimiento exponencial”, afirmó.
Hasta hace unos tres años sólo se contaba con cinco equipos en todo el país y ahora ya son unos 16, por lo que se espera que conforme crezca la oferta pueda volverse más accesible, abundó.