Este tipo de cáncer está directamente relacionado con la salud digestiva, se estima que tres de cada 10 tumores están asociados en la vía digestiva
Mantener una microbiota sana, llevar una dieta balanceada y un adecuado manejo del estrés, no abusar de antibióticos y realizar ejercicio serían factores claves para prevenir el cáncer de colon.
En el marco del Día Mundial de la Salud Digestiva, que se conmemoró ayer, el doctor José Cadena, gastroenterólogo y endoscopista, dijo que el cáncer de colon, también conocido como colorrectal o del intestino grueso, si bien tiene orígenes genéticos también hay factores ambientales que pueden incidir en su desarrollo.
El asesor de la empresa Biocodex detalló que entre estos factores se encuentra la dieta, que en la actualidad está basada en “azúcares refinadas, carnes procesadas, grasas saturadas y trans”.
“Todo puede favorecer a la inflamación del colon”, señaló el especialista.
De acuerdo con datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el cáncer colorrectal es el tercer tipo de tumor más común en Latinoamérica y en 2018 provocó poco más de 860,000 muertes a nivel mundial.
Este tipo de cáncer, aseguró, está directamente relacionado con la salud digestiva. “Se estima que tres de cada 10 tumores están asociados en la vía digestiva”, señaló el experto.
Actualmente, resaltó, existen estudios realizados en Irlanda por la empresa Biocodex que han analizado el papel de la microbiota en el desarrollo del cáncer y se encontró que ésta puede proteger al intestino de la colonización de bacterias patógenas que pueden favorecer la aparición de este padecimiento.
“La abundancia de la bacteria Lachnospiraceae en el colon es buena, pero para ello se debe tener una dieta equilibrada, que sea baja en grasas y azúcares, lo cual favorece la aparición de esta y otro tipo de bacterias protectoras”, indicó.
Dijo que, en un futuro, el estudio de la microbiota podría ayudar a predecir, a través de ciertos marcadores, el riesgo de desarrollar este tipo de cáncer y con ello se llevaría a una detección más oportuna y a un tratamiento adecuado que pudiera salvar la vida de los pacientes.
“Estudiar el papel de la microbiota en el tubo digestivo es fundamental porque esta permite reducir la adhesión de bacterias que sean patogénicas”, aseveró.
En complemento a una buena alimentación, otras medidas que favorecen la buena salud de la microbiota intestinal son la actividad física y el adecuado manejo del estrés.
En caso de padecimientos relacionados con su alteración, como las diarreas, el consumo de probióticos ha demostrado alta efectividad en la recuperación de su equilibrio.
“No quiere decir que esto cure el cáncer colorrectal, pero sí ayuda a prevenir la aparición de este“, finalizó el experto.
El cáncer colorrectal es el tercer tipo de tumor más común en Latinoamérica. De acuerdo con datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en 2018 este cáncer provocó poco más de 860,000 muertes a escala mundial.