La primera acción es realizar un lavado con agua y jabón las zonas afectadas, en tanto, se interroga al paciente a fin de conocer las características del animal que realizó la mordedura
Con motivo del Día Mundial contra la Rabia, que se conmemoró el 28 de septiembre, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informa que desde 2006 y hasta la fecha no ha habido fallecimientos en el país por rabia transmitida por perros, enfermedad provocada por la mordedura, laceración o lamedura de estos caninos y por mamíferos infestados como murciélagos, zorrillos, zorros y coyotes.
Entre enero y agosto de 2019, en el IMSS se han atendido 15 mil 29 pacientes con mordeduras por perro y mil 216 con mordeduras por otros mamíferos transmisores de la enfermedad. Si bien entre 2006 y 2018, no se ha presentado ningún caso de rabia en humanos transmitida por perros, sí se diagnosticaron 23 casos en los que los trasmisores fueron murciélagos y zorrillos, entre los más recurrentes.
Así lo señaló el doctor Nibardo Paz Ayar, Coordinador de Programas Médicos en la Coordinación de Atención Integral a la Salud en el Primer Nivel del IMSS, quien explicó que toda persona agredida por un animal, ya sea callejero, silvestre o del hogar, recibe atención en el área de urgencias o con su médico familiar, pues en ambos servicios se cuenta con personal capacitado.
La primera acción es realizar un lavado con agua y jabón en la o las zonas afectadas, en tanto, se interroga al paciente a fin de conocer las características del animal que realizó la mordedura; si hay sospecha del contagio de rabia, se brinda tratamiento con anticuerpos que van a neutralizar y contrarrestar la acción del virus de manera inmediata, y se puede aplicar la vacuna antirrábica humana o antibióticos. El Seguro Social cuenta con los tratamientos, afirmó.
Señaló que en el momento en que se manifiestan síntomas como dolor en el lugar de la mordida o laceración, la persona está hiperactiva, desorientada, tiene delirios, alucinaciones, convulsiones y se paralizan los músculos de la respiración, la posibilidad de muerte es muy alta, de ahí la importancia de acudir de manera oportuna a recibir atención médica, ya sea en el área de urgencias o con el médico familiar.
El tiempo de desarrollo de la enfermedad en el ser humano y en el que comienza a presentar síntomas va desde los seis hasta 249 días, y en promedio son 69 días después de la agresión, indicó.
El doctor Paz Ayar destacó que si bien el perro causa el 95 por ciento de los casos de infecciones por rabia a nivel mundial, en México la principal vía de transmisión es por otros mamíferos como el murciélago.
Agregó que en el área rural de nuestro país se encuentra una gran variedad de estos animales silvestres y se consideran zonas de alto riesgo para la transmisión del virus de la rabia, por lo que las curaciones, tratamientos médicos y vacunas, además del régimen ordinario, también se ofrecen en unidades y hospitales del programa IMSS-Bienestar.
Explicó que si bien es común que los perros que se tienen como mascotas tengan la vacuna antirrábica, es preferible evitar el contacto con su lengua, ya que las mucosas del ser humano como la parte interior de la nariz, de la boca, los ojos o alguna herida expuesta, al entrar en contacto con la saliva del animal puede provocar el contagio ya sea de rabia o alguna otra enfermedad que tenga la mascota, pues en los colmillos alojan diversos tipos de bacterias.
La rabia afecta a más de 150 países en el mundo y provoca alrededor de 60 mil muertes cada año; más del 95 por ciento de los decesos ocurren en Asia y África; en América, la enfermedad ha ido a la baja, pero la rabia en perros sigue siendo frecuente en países como Bolivia, Guatemala, Haití y República Dominicana, de ahí la importancia de conmemorar el Día Mundial contra la Rabia, que permite concienciar a la población mundial respecto a esta enfermedad y la importancia de buscar atención médica de manera oportuna.